Hace dos meses, la entidad había advertido sobre la incertidumbre y el impacto económico que sufren estas empresas —que emplean en conjunto a más de 800 trabajadores— debido a atrasos en los pagos, suspensiones de personal y una ausencia de definiciones oficiales que permita normalizar la operatoria.

El panorama, según la CIMCC, no muestra avances al mes de noviembre, lo que agrava la preocupación del sector y pone en riesgo una oportunidad concreta surgida el 12 de septiembre, cuando la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (FEMIA) presentó una solicitud por 24 aeronaves en un proyecto de desarrollo compartido.

Este acuerdo potencial, que implicaría ingresos externos significativos para FAdeA, permitiría actualizar el modelo PAMPA-MX, mejorando su competitividad, generando ventas internacionales y fortaleciendo la posición tecnológica de la empresa y su red de proveedores.

La CIMCC, a través de su Comisión Aeroespacial Metalúrgica, adhiere al comunicado emitido por la Cámara Argentina Aeronáutica y Espacial (CArAE) y considera urgente regularizar la deuda con los proveedores, además de definir un plan de negocios estratégico que garantice la continuidad y sustentabilidad del sector.

La entidad advierte que la inacción en este escenario podría derivar en la pérdida de capacidades industriales y tecnológicas únicas en el país, junto con la desaparición de un entramado productivo que sostiene empleo calificado, ingeniería avanzada y alto valor agregado dentro de la industria nacional metalúrgica y aeronáutica.