Recuperación en el momento justo

Después de semanas con escasa humedad en el perfil, las lluvias de septiembre en La Pampa trajeron alivio y renovaron las expectativas en el sector agrícola.
Los registros acumulados fueron suficientes para revertir el estrés hídrico en la mayoría de las zonas productivas, mejorando la condición general de los cultivos de trigo y cebada, que hoy se califican entre buenos y excelentes.

Trigo y cebada con buen potencial

Los lotes de trigo atraviesan el período de llenado de granos, una etapa decisiva para definir el rinde final. En tanto, la cebada muestra un desarrollo vegetativo vigoroso, impulsado por las recientes precipitaciones y temperaturas moderadas.
Los técnicos destacan que, de mantenerse las condiciones climáticas actuales, las proyecciones de rendimiento son alentadoras en gran parte de la provincia.

Atención sanitaria en los lotes

A pesar del panorama favorable, los especialistas mantienen la vigilancia fitosanitaria, ya que se detectó la presencia de roya amarilla en trigo y mancha en red en algunos lotes de cebada.
Las recomendaciones se centran en monitorear periódicamente los cultivos y aplicar medidas preventivas para evitar pérdidas de rendimiento.

Optimismo en el sector

Con los cultivos en buena condición y un escenario climático que se perfila estable, los productores pampeanos recuperan el optimismo de cara al cierre de la campaña invernal, a la espera de que las lluvias continúen acompañando el desarrollo final de los cultivos.