Agosto “histórico”: el trigo argentino marcó récord de exportaciones en un mes atípico
Agosto sorprendió al mercado granario con un hito poco habitual: las exportaciones de trigo argentino superaron las 790.000 toneladas, el mayor volumen para este mes en al menos siete años.
????Las exportaciones de trigo alcanzaron un récord para agosto
— BCR Mercados (@BCRmercados) September 8, 2025
???? Más de 790.000 t embarcadas en el mes: máximo histórico.
???? El precio de exportación es de los más competitivos del mundo, inclusive en agosto estuvo por debajo del ruso, en plena cosecha.https://t.co/jIAziZX6tH pic.twitter.com/mzBg7zJJV8

Según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el embarque estuvo 53% por encima de lo previsto, triplicó lo exportado en agosto de 2024 y duplicó el promedio del último septenio.
El récord se explica por un escenario global atípico: la demora en la cosecha rusa y la ocupación de buques con maíz a fines de 2024 liberaron espacio para el trigo argentino, que ganó competitividad en el mercado internacional. El FOB nacional promedió 234 dólares por tonelada, incluso cotizando por debajo del ruso, algo excepcional ya que en los últimos seis años solía estar un 20% más caro que el cereal del Mar Negro.
“El retraso de la cosecha rusa abrió una ventana de competitividad que Argentina aprovechó”, explicaron los analistas Matías Contardi y Julio Calzada, autores del Reporte de Granos de la BCR.
Sin embargo, esa ventana comienza a cerrarse: en septiembre, Rusia reactivó sus embarques y el FOB volvió a bajar de 238 a 230 dólares por tonelada, con estimaciones de exportar hasta 44 millones de toneladas en la campaña actual.
Más oferta, precios a la baja
El buen desempeño argentino se da en un contexto de caída generalizada de precios internacionales. Francia, Alemania, Rusia, Estados Unidos y Canadá muestran una recuperación productiva, a lo que se suman expectativas positivas para las cosechas de Argentina y Australia.
Por el lado de la demanda, China reduce su rol comprador: tras levantar una cosecha de unos 140 millones de toneladas, pasó de importar más de 13 millones en 2022/23 y 2023/24 a solo 4 millones en la última campaña. Esa menor presión obliga a redireccionar oferta hacia otros destinos y contribuye a la baja de las cotizaciones.