Conseguir personal para trabajar en los campos se ha convertido en un dolor de cabeza para productores de distintas regiones del país. Según un relevamiento de Adecco Argentina, la combinación de estacionalidad productiva, incorporación de tecnología y pérdida del “legado laboral” de las familias rurales está redefiniendo la forma de contratar en el agro y complicando el acceso a perfiles clave.

“Hace más de 20 años trabajamos junto al sector agroindustrial en todo el país, y hoy vemos un escenario donde conviven la necesidad de mano de obra calificada con la pérdida del legado laboral rural de las generaciones anteriores”, señala Mario Eugenio Dupouy Rea, Gerente Comercial de Outsourcing Agro de Adecco.

Regiones y perfiles más demandados

Las regiones del NOA y Cuyo concentran gran parte de la demanda estacional, especialmente en la producción frutícola, mientras que la zona núcleo mantiene actividad vinculada a semillas aunque con menor necesidad de personal.

Los perfiles más buscados son ingenieros y técnicos agrónomos (muchas veces con experiencia comercial o en seguridad e higiene), además de trabajadores experimentados en cosecha manual de frutas y verduras.

Puestos difíciles de cubrir

Los mayores problemas aparecen en la contratación de trabajadores temporarios para cosecha a destajo, donde la rotación y la falta de registro formal son moneda corriente. “A la dificultad de conseguir personal experimentado se suma la baja fidelización: muchos migran de un empleo a otro sin registro formal”, remarcan desde Adecco.

Tecnología: oportunidad y brecha

La incorporación de nuevas herramientas ha reducido la necesidad de mano de obra en algunas etapas, pero también plantea un desafío: muchos jóvenes rurales carecen de la capacitación necesaria para operar equipos modernos, lo que amplía la brecha entre demanda y oferta.

Estacionalidad y planificación

La contratación temporal sigue siendo la norma, marcada por picos de demanda donde muchas veces el personal disponible no tiene la experiencia requerida. Esto afecta especialmente a las economías regionales, donde el trabajo no registrado continúa siendo un problema estructural.

Brechas y obstáculos

El informe de Adecco enumera los principales desafíos en materia de empleo en el agro:

• Formación: predominan trabajadores con primaria completa o secundaria incompleta, salvo en perfiles profesionales.

• Participación femenina: crece la presencia de mujeres en tareas culturales manuales.

• Jóvenes: aunque hay demanda, muestran baja disposición al aprendizaje y poca permanencia.

• Salarios: el agro paga menos que otras industrias productivas, con variaciones anuales ligadas al contexto exportador y político.