Fabián Otero, de la Asociación Argentina de Angus indicó que las mediciones ya culminaron: “Ya se hicieron las calidades de carcasa, la calidad seminal y ya pasó el inspector de la Asociación Argentina de Angus. Nos falta la última jura, la pesada final y ver cuales son los ganadores de esta nueva edición”. Explicó que “es una prueba dura un año prácticamente, una recría a campo con unos 70 toros. Este año fuimos 50 cabañas las que participamos, de la provincia de Córdoba, Santa Fe y San Luis. Este año en Buena Esperanza, San Luis, en el establecimiento Huelucan de Tigonbu S.A.”. Se trata de una recría a campo, sin confinamiento. Se realizan tres juras fenotípicas donde se van dando distintos puntajes a los animales: “Vamos evaluando, sale un ganador y se rankean todos los toros que terminan la prueba pastoril. Esos toros los ofrecemos a la venta el segundo viernes de octubre, este año el 8 de octubre en la Sociedad Rural de Río Cuarto”, señaló Otero. Adelantó que en el remate se suman aproximadamente 70 vaquillonas seleccionadas tipo elite, puras controladas y algunas de pedigree del concurso “Pedro Hernan Lloret”. También ofrecerán 200 vaquillonas más que aportarán las distintas cabañas participantes, puras de pedigree, puras controladas y terneras para entorar. “El martillo que nos acompañó todos los años, es de la firma de Rio Cuarto, Testa Lelli Liaudat y la financiación es la tradicional, que son 90 días libres y fletes gratis hasta 250 kilómetros. Se reciben las tarjetas de crédito ganaderas tradicionales”, finalizó Fabián Otero.