Esta semana, el CAA, que representa a 63 cámaras y 36 cadenas de valor, presentó una propuesta formal a los jefes de Bloque del Senado de la Nación. La solicitud se centra en realizar cambios en el Régimen de Incentivo para Medianas Inversiones (RIMI) dentro del Proyecto de Ley de Modernización Laboral.
Los empresarios buscan corregir exclusiones que afectan a un grupo sustancial de empresas agropecuarias y agroindustriales para lograr un régimen verdaderamente federal que promueva el empleo y la inversión.
El CAA advierte que, bajo la redacción actual, un gran porcentaje de las inversiones agroindustriales de economías regionales quedarían excluidas de los beneficios. Esto afecta a bodegas, plantas de procesamiento de alimentos y bebidas, plantas de tratamiento de semillas, molinos y la industria de maquinaria agrícola. Actualmente, el RIMI excluye inversiones agroindustriales, impactando el 18% del PBI y el 65% de las inversiones productivas anuales.
El conglomerado de empresas propone modificar los artículos 175 y 177 del proyecto. Buscan eliminar las restricciones que limitan el beneficio solo a Micro, Pequeñas o Medianas empresas, permitiendo que cualquier empresa agropecuaria pueda aplicar si realiza inversiones significativas.
Además, el CAA sugiere una nueva categoría de inversión con un monto mínimo de 30 millones de dólares para acceder a los beneficios, abriendo la posibilidad a empresas no categorizadas como PYMEs.
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